Una noche de zombies para hacer turismo, el sábado 26 de septiembre fue una noche diferente en Montemayor. Alrededor de 700 participantes y más de 2000 espectadores, llenaron las calles de la localidad durante las nueve horas que duró este Real Game:
algunos participaban como zombies, otros como guías o actores, miembros de la organización, un buen nutrido grupo de militares y, aproximadamente, 500 supervivientes. A todos ellos hay que sumarle los ciudadanos de Montemayor y las más de 2000 personas que vinieron a disfrutar de este increíble espectáculo, todos se volcaron a ayudar a los participantes y la organización, deseosos de conocer lo que se estaba cociendo en el pueblo y cuál iba a ser el desarrollo del juego.
Todo había empezado a las cuatro de la tarde, cuando abrimos el Check-In. A partir de ese momento, un constante goteo de personas fue llenando el Hábitat, el espacio habilitado para esta tarea. Allí controlamos la asistencia de los participantes y les entregamos los materiales necesarios para el desarrollo del juego; entre ellos, el pañuelo que los identificaba como supervivientes o como zombies. Estos últimos dependiendo de la entrada que tuvieran podían venir maquillados de casa o pasar por nuestra sala de maquillaje, donde nuestros maquilladores les harían parecer unos auténticos no-muertos. Así que, a lo largo de la tarde, esa sala fue tomando el aspecto de una película de terror, poblada de personajes que lucían orgullosos su sangre, vísceras y carne putrefacta.
El pistoletazo de salida para el juego tuvo lugar a las diez y media de la noche en el campo de fútbol. A partir de entonces, empezó para los supervivientes una ruta por Montemayor que pondría a prueba su ingenio -a través de las pruebas que debían resolver-, su capacidad estratégica, velocidad y resistencia -para huir de los zombies- y sus ganas de luchar por escapar de la invasión y sobrevivir.
Después de casi nueve horas de correr perseguidos por los zombies runner o de caer sorprendidos por emboscadas, solo unos pocos participantes lograron sobrevivir y alcanzar la prueba final, que se desarrollaba el campo de fútbol de Montemayor. Fue entonces cuando los jugadores capaces de resolver este último enigma consiguieron subir a los vehículos que los llevarían a la salvación, lo más lejos posible de la infección zombie. Se trataba de José Alberto Jafepe, Sara Pérez Lindo, Clara Rodríguez Navarro, Álvaro Moreno, Juan H. Moral García y Jesús Orozco Carandell, nuestros ganadores, a quienes queremos felicitar desde aquí y esperamos poder entrevistar muy pronto.
A ellos y al resto de participantes queremos agradecerles las ganas de participar en esta Supervivencia Zombie de Montemayor, su ilusión por disfrutar del evento y por hacerlo en las mejores condiciones para todos. Por eso, agradecemos especialmente a todos aquellos que se esforzaron por cumplir las normas establecidas para supervivientes y zombies.
También debemos destacar que el desarrollo del evento fue mucho más fácil para todos gracias a la participación de voluntarios, que nos estuvieron prestando su colaboración desde el momento en que se abrió el Check-In, ayudando a organizar la llegada de los jugadores y participando también como guías de grupo o maestros de zombies.